UN NUEVO ANIVERSARIO DEL LLAMADO “PACTO DEL CLUB NAVAL” 3 de agosto de 1984
Pacto del Club Naval aún vigente
3 de agosto de 1984. En secreto se resolvió el presente
La derrota de plebiscito constitucional de 1980, y el acto del 1° de mayo forzaron a los militares a iniciar negociaciones para una salida democrática.
El pueblo dijo NO a los militares
Acto del 1 de mayo 1983
Acto en el Obelisco 27 de noviembre 1983 “Un Uruguay sin exclusiones” reunió a 500.000 uruguayos
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La Iglesia Católica y la Gran Logia de la Masonería hicieron esfuerzos para facilitar la salida de la dictadura a una democracia pactada.
El 5 de agosto de 1984 Gregorio Álvarez firmó el llamado Acto Institucional Nº 19 conteniendo íntegramente el Pacto del Club Naval. Ese mismo día, en una larga carta enviada desde su prisión, Wilson Ferreira Aldunate dio a conocer su posición sobre el que él llamaba “El Pacto Medina-Sanguinetti.” En su parte medular, el mensaje del líder del Partido Nacional decía: “Por fin y como era de prever aun desde antes de comenzar públicamente el llamado diálogo, éste ha culminado con el Pacto del Club Naval (…) Fuerzas Armadas y dialoguistas buscaron -¿por qué dudarlo?- una salida que consagrara un ni vencidos ni vencedores (…) Pero cerraron deliberadamente los ojos ante la evidencia de que el camino que escogieron transitar significaba elegir un vencido en el Partido Nacional (…) Y no es necesario compartir nuestra convicción de que representamos, hoy todavía más que antes, la gran mayoría del país, para saber que no hay ninguna solución estable si se prescinde del Partido Nacional.” “Todos saben que me conmueve ver al partido movilizándose para exigir mi libertad, en una forma que no podré olvidar jamás (…) pero ahora, cuando entramos a decidir nuestra posición sobre el pacto Medina- Sanguinetti, los argumentos decisivos ya no son simplemente entre los que nos llevaron a no acudir a la COMASPO y al Club Naval (…) El pacto compromete y muy gravemente todo el futuro democrático del país (…) el Acto Institucional que pudiera dictarse será tan malo -y quizás más malo- que los anteriores.” “Hoy como siempre, tenemos que honrar la vieja divisa de Defensores de las Leyes junto a la inmensa mayoría de los orientales. Hay que decirlo -decirlo ya-, con nosotros no va. No va con el país. ¡Que lo sepan!”7 El pacto marcó el fin de la dictadura y sentó las bases de la transición pacífica hacia la democracia. Las elecciones nacionales de 1984 se realizaron con Ferreira, Seregni y Batlle proscriptos políticamente. También hubo otros políticos del Frente Amplio proscriptos. El Pacto del Club Naval no se cumplió en su totalidad. Uno de los puntos acordados allí era la conformación de una Asamblea Nacional Constituyente para que convocara a elecciones libres y sin restricciones en 1985. Sin embargo, instaladas las nuevas autoridades, nadie volvió a hablar del asunto.
En 1986 se aprobó la ley 15.848 de Caducidad de la Pretensión Punitiva del Estado mediante la cual se estableció la caducidad del “ejercicio de la pretensión punitiva del Estado respecto de los delitos cometidos hasta el 1º de marzo de 1985 por funcionarios militares y policiales, equiparados y asimilados por móviles políticos o en ocasión del cumplimiento de sus funciones y en ocasión de acciones ordenadas por los mandos que actuaron durante el período de facto”. Dirigentes del Partido Nacional, en ocasión de fundamentar su apoyo a ley, afirmaron que la impunidad para militares se había acordado en forma implícita en el Pacto del Club Naval,8 hecho que siempre fue desmentido por los participantes.
Aun tenemos una democracia tutelada