LA AVENIDA INMUTADA
Opinión | 20 de mayo:
el silencio generalizado, que como no
grita, habla fuerte y claro
Como dijo Luisa Cuesta, se morirán los más viejos, pero quedarán herederos que seguirán luchando por verdad y justicia.
21.05.2019
La memoria no sabe de tiempos. Y es una clara muestra de ello que cada 20 de mayo 18 de Julio quede inmutada por el silencio. No hay ruido en la ruidosa avenida, ni gente caminando en diferentes direcciones. Hay un reclamo generalizado que como no grita, habla fuerte y claro.
Las Marchas del Silencio demuestran que la búsqueda de una respuesta ya no es (o nunca fue) parte de un pasado reciente, porque es el presente en pura manifestación. Y el trabajo sobre la memoria como proyecto de identidad de un pueblo deberá durar todo el tiempo que se demore encontrar las contestaciones.
Las marchas muestran el dolor de una madre que no puede dejar una flor en la tumba de su hijo desaparecido; y también son la fiel manifestación de la herida más profunda que tiene este pueblo. Y sanarla es solo una responsabilidad de Estado.
Es que es como dijo, sabía, Luisa Cuesta: “El ‘nunca más’ no va estar en el camino de la reconciliación. De ninguna manera. No pueden pedir reconciliación los militares mintiendo como mienten todos los días; alguno de vez en cuando se debe acordar y decir lo que supo, lo que vio o lo que oyó. Se perdieron los que lo hicieron, se murieron los primeros, como se murieron los nuestros, los primeros luchadores y nosotros heredamos seguir luchando. Nos moriremos nosotros, los más viejos también, pero vamos a dejar gente que siga luchando en esto, porque es natural que sigamos por la verdad. Por una verdad y una Justicia que este país necesita para que nunca más haya dictadura”.
Buena parte de la ciudadanía ya ha hablado, pero por si quedan dudas seguirá recordando en silencio y reafirmando un compromiso cada 20 de mayo.
Agustín Zabala / Montevideo Portal