Indagado por un secuestro en Brasil en 1978
Eduardo Ferro fue al Juzgado, pero se negó a declarar
“CARAS Y CARETAS” – 28/04/2016
Eduardo Ferro, ex jefe de Contrainteligencia de la dictadura, se negó a declarar ante la Justicia en el caso por el secuestro de Lilián Celiberti y Universindo Rodríguez.
El coronel (r) Eduardo Ferro compareció ante la Justicia en el marco de la indagatoria penal por el secuestro en Brasil y traslado ilegal a Uruguay de los ex militantes del PVP, Universindo Rodríguez y Lilián Celiberti -y de sus hijos menores edad-, pero se negó a declarar ante la Sede, por consejo de su abogado Carlos Bustamente.
La jueza Penal de 7º Turno, Beatriz Larrieu, dispuso la citación de Ferro y otros tres militares, por su presunta participación en el procedimiento que derivó en la detención en Brasil del matrimonio y su posterior traslado a Uruguay. El objetivo era avanzar en la investigación sobre los hechos, para deslindar eventuales responsabilidades.
Sin embargo, los cuatro militares se limitaron a contestar las preguntas de rigor (fecha de ingreso y cese a la carrera militar y unidad donde prestaban funciones en 1978), pero se negaron a contestar sobre el fondo del asunto, dijeron fuentes judiciales a Caras y Caretas Portal. “Es un derecho de las personas que son indagadas en sede judicial”, agregaron las fuentes. Asimismo, Ferro presentó un recurso en el que alegó que los hechos están prescriptos y no pueden ser investigados, por lo que se formó una pieza para tratar este incidente.
La actitud de Ferro es similar a la que asumieron otros militares en otras causas que investigan graves violaciones a los derechos humanos durante la última dictadura. En efecto, un grupo de militares se negó a contestar las preguntas formuladas por los abogados del Observatorio Luz Ibarburu, en el marco de la investigación por el homicidio de Nelson Berreta, en 1972.
Ferro fue un hombre relevante dentro del organigrama militar de la dictadura. Fue jefe del Batallón de Contrainteligencia Militar, integró el SID y la OCOA y recibió un curso en la Escuela de las Américas en Estados Unidos. En este marco, Ferro tuvo una activa participación en operativos vinculados al Plan Cóndor. Entre ellos, la “Operación Zapato Roto”, en conjunto con autoridades de Brasil, que derivó en la detención y traslado ilegal de Rodríguez, Celiberti y sus hijos.
Según una crónica del diario La República, Rodríguez y Celiberti fueron interrogados y torturados en Brasil, y posteriormente fueron llevados a la frontera con Uruguay, para su ingreso ilegal al país. Fueron alojados en el Parque de Santa Teresa (Rocha), donde fueron nuevamente interrogados bajo tortura. Los niños fueron separados de su madre y posteriormente, entregados a su abuela. Celiberti y Rodríguez estuvieron recluidos en la Compañía de Contrainformación, en su local de la calle Colorado y luego en el Batallón de Infantería Blindada Nº 13. Permanecieron en prisión hasta marzo de 1984.