Evento contra el vaciamiento del Espacio Cultural Nuestros Hijos
Un abrazo al Espacio
El Gobierno canceló los convenios con ministerios que hacían posibles las actividades en el ámbito de las Madres en la ex ESMA y no paga los salarios de los trabajadores. Anuncios de resistencia y duras críticas.
Por María Daniela Yaccar
“Este lugar va a seguir funcionando como sea”, aseguró Hebe de Bonafini en el hall del Espacio Cultural Nuestros Hijos, al inaugurar la jornada “Este abrazo”. Desde que comenzó el gobierno de Mauricio Macri, el espacio cultural y educativo de las Madres de Plaza de Mayo en la ex ESMA no cuenta con apoyo del Estado. Cientos de personas se acercaron ayer para abrazarlo y defenderlo. Desde las 16 se desarrollaron talleres, actividades participativas y espectáculos. Se presentaron Los Musiqueros y Alejandra Pastor, quien invitó a Teresa Parodi en una canción, entre otros artistas. El cierre estuvo a cargo de Arbolito. “Es momento de luchar, no para decir que volveremos, porque no nos fuimos ni nos vamos a ir”, subrayó Bonafini.
La presidenta de Madres llegó al ECuNHi pasadas las 16 y fue ovacionada. Ingresó del brazo de Verónica Parodi, directora del espacio junto a María de los Angeles Ledesma. “Si lo hacemos juntos, va a salir bien”, dijo Bonafini. Los presentes habían hecho una ronda para escucharla. Informó que estaban conversando con “muchos lugares” y solicitó “apoyo real” a los asistentes: “Es mejor un pesito de cada uno que pedir mucho en un lugar”. Hizo una advertencia: que Macri “quiere traer de nuevo a la Marina a este lugar”. “Si vuelve, entre todos levantaremos un muro alrededor del ECuNHi. Con los asesinos nunca vamos a convivir. Y no tenemos interés en hablar con Obama ni con Macri. Son una manga de atorrantes que están rematando el país”, criticó.
“Vamos a defender este lugar a capa y espada. El (por Macri) no sabe con quién se metió. En cuarenta años nadie nos pudo sacar de la plaza, tampoco va a poder Macri”, remarcó. Los convenios que tenía el ECuNHi con PAMI y los ministerios de Trabajo, Cultura, Desarrollo Social y Educación se disolvieron. Si bien el espacio es de las Madres, mucho de lo que sucedía allí dependía de esos acuerdos. Los más de treinta trabajadores del lugar no están cobrando. “Vamos a seguir estando, haciendo y construyendo. Damos inicio a una nueva etapa. Necesitamos el apoyo de cada uno de ustedes”, instó Verónica Parodi.
Del abrazo participaron desde niños hasta personas que rozaban los noventa años. Muchos tenían una relación previa con el ECuNHi, eran personas cuyos derechos están amenazados. “Están rompiendo el tejido social”, opinó Luciano Burgos, coordinador de La Huella del Sur, un programa del Ministerio de Cultura que fue vaciado por el nuevo gobierno. La iniciativa apuntaba a la formación de elencos infantiles de teatro comunitario en zonas vulnerables. Ayer al ECuNHi habían llegado ochenta chicos del barrio Ejército de los Andes, Villa Independencia, William Morris y Villa Ilaza, que ofrecieron al aire libre la obra de teatro La niña y la luna. Del programa fueron despedidos 27 de 35 talleristas. “Tomamos la decisión de continuar el programa como podamos”, dijo Burgos. La nueva gestión nunca revisó el trabajo que realizaban.
El aire libre era de los chicos, que participaban del taller de circo Carpa Abierta. En tanto, en el hall donde se vendían discos y libros, había una multitud de adultos mayores preocupados: todos los que se quedaron –al menos por ahora– sin sus talleres de las más diversas disciplinas y gratuitos. PAMI aportaba los micros que los llevaban hasta el ECuNHi y Desarrollo Social financiaba a los docentes. Cientos de personas llegaban por día a través de este programa. Algunas destacaban ayer “la alegría de la merienda”, “el trato de los profesores” y “la inclusión de discapacitados”. “Esto nos salvó la vida. Somos gente grande de vuelta de un montón de cosas gravísimas. ¡Fuimos tan felices! Esto nos curó el alma y el físico. Por eso estamos tan mal de que cierre”, se lamentaba Alicia, rodeada de compañeras que estaban también decepcionadas.
Los artistas que participaron del abrazo lo hicieron desde la militancia, ya que no cobraron por sus presentaciones. Arbolito había ofrecido a la dirección del ECuNHi un recital gratuito. Ese fue el germen que finalmente se convirtió en el abrazo: “Cuando nos enteramos de que se había anulado la subvención estatal, tomó más sentido todavía el hecho de hacer algo”, sostuvo Pedro Borgobello. “Estamos entrando en un momento muy difícil, pero no es la primera vez que estamos en el lugar de la resistencia.” Por otro lado, un grupo numeroso de escritores e ilustradores de literatura infantil y juvenil, entre los que se encontraban Laura Devetach, Istvansch, Mario Méndez, Ema Wolf y Silvia Schujer, anunciaron la realización de otro abrazo al ECuNHi para el 9 de abril.
Las Madres siguieron de cerca todas las actividades. “Siento una gran emoción. No nos ganaron en nada. Tenemos el orgullo de los hijos que parimos y de que otros estén siguiendo su lucha. Acá podemos cantar, recitar y bailar. Estamos rodeadas de amor”, decía Mercedes “Porota” Meroño, luego de la presentación de la murga Los Revoltosos del ECuNHi, integrada por adultos mayores con trajes rojos y azules y sombreros