Un sindicalista-combatiente; Oscar Tassino

 DESAPARECIDO

Oscar Tassino

17.06.2019

MONTEVIDEO (Uypress) – A las ocho de la mañana tres hombres de particular y a cara descubierta ingresaron violentamente y a los gritos en la vivienda de Máximo Tajes 6632.

Amenazando con armas de fuego a los ocupantes, el matrimonio Luis Fulle Fleitas y Ana María Regnier de Fulle, aguardaron aproximadamente una hora dentro de la residencia hasta que al llegar Oscar Tassino, amigo de los propietarios de la vivienda, lo redujeron violentamente otros dos hombres armados que aguardaban afuera.

Una vez dentro de la vivienda lo condujeron a una de las piezas del fondo de la finca donde le propinaron una golpiza.

A los pocos minutos se sumaron al copamiento otros cinco sujetos. El matrimonio Fulle declaró que los individuos agredieron a golpes a Tassino y minutos después lo retiraron de la vivienda con la cara envuelta en una bufanda en un Peugeot Blanco.

Los Fulle permanecieron bajo custodia de sus captores durante dos días hasta las 19 horas del día lunes. Durante ese lapso de tiempo en horas avanzadas de la noche concurrieron otros hombres con vestimenta del ejército con provisiones y alimentos para los copadores.

Antes de retirarse la persona que parecía al mando, acompañado por una mujer morocha de unos veinticinco o treinta años, le informó al Sr. Fulle que debían agradecer a las fuerzas conjuntas y al comando por dejarlos vivos. A cambio, disponían de dos horas para abandonar el País.

La última información que se tuvo de Oscar Tassino fue gracias al testimonio de una mujer que al momento del secuestro se encontraba recluida ilegalmente en un lugar denominado por sus captores “Base Roberto” y conocido públicamente como el establecimiento La Tablada, ubicado en Camino Melilla y Camino Luis Eduardo Pérez en el departamento de Montevideo.

La testigo afirmó oír al detenido desaparecido el mismo lunes en que se liberó al matrimonio Fulle. Escuchó un forcejeo con los hombres que lo custodiaban, ruidos y un golpe contra un lavabo. Luego el temido traslado al segundo piso.

Las versiones posteriores son confusas y a veces contradictorias. Incluso el Comandante en Jefe del Ejército indicó en un informe al Presidente de la República, como causal de fallecimiento el suicidio. No hubo autopsia. No hubo restos mortales. Lo cierto es que nada se ha esclarecido y su familia ha agotado todas las instancias posibles, tanto nacionales como internacionales para saber el paradero de Oscar luego de su detención y secuestro.

Oscar Tassino, de cuarenta años, casado, padre de tres hijos, empleado de UTE, falta de su hogar desde la mañana del 19 de julio de 1977.

Su hermano Javier, ocho años menor, lo recuerda muy familiero. Muy humano. Esa preocupación por el prójimo lo impulsó a los quince años a escribirle una carta al presidente para hablarle del futuro de los jóvenes. Martínez Trueba le contestó. Como se usaba en aquellos tiempos, con otra misiva.

Luego vino la participación política y sindical. Su búsqueda por una sociedad más democrática, su lucha firme por mejorar la situación de los trabajadores.

Su mamá lo buscó como hacen las madres, hasta su último día. Y Oscar hizo falta para acompañar a los suyos en las difíciles y en esos momentos que alegran la vida como el nacimiento de sus seis nietos y su bisnieto. Todos acompañaron en alguna oportunidad, en las marchas que año a año buscan que sus familiares no se diluyan en el olvido sin respuestas, la foto en blanco y negro y gritaron “¡Presente!” al escuchar el nombre del abuelo.

Su esposa Disnarda Flores detenida hasta 1978 en el cuerpo de Fusileros Navales de la Armada Uruguaya (FUSNA) y luego hasta 1979 en Punta Rieles, al salir continuó las gestiones ante organismos diplomáticos y militares en busca de Oscar. Cuando estos últimos le dijeron que estaban mucho mejor organizados, les dijo que no había perdido un paquete. Había perdido a su marido. Disnarda falleció sin saber que le pasó a la persona que eligió para compartir la vida.

Hace 41 años, 10 meses y 11 días que buscamos respuestas.

Al momento de los hechos relatado por la testigo, el establecimiento de la Tablada estaba bajo la órbita del Órgano Coordinador de Operaciones Antisubversivas (OCOA).

Creado en cada una de las cuatro Regiones Militares en que se dividía el Ejército hasta el año 1973, dependiendo directamente del General de la Región y/o División correspondiente, utilizando como centros de detención e interrogatorios las propias unidades militares existentes en el área de acción.

Lista parcial de los integrantes de la OCOA al momento de la detención: 

General CRISTI NICHELET, Esteban Rivera

General ZUBÍA OLIVERA, Rodolfo Héctor

Coronel GONZÁLEZ ARRONDO, Julio César

Teniente Coronel CALVO GONCALVEZ, Manuel Adolfo

Teniente Coronel RAMAS PEREIRA, Ernesto Avelino

Mayor CHIOSSI PEREYRA, Martiniano Omar 

Mayor VÁZQUEZ, Luis

Mayor SOSA TEJERA, Rubén Atilio

Capitán TABAREZ FIORENZA, Julio Darío

Teniente Primero OHANNESSIAN OHANNIAN, Antranig 

Teniente Primero SILVEIRA QUESADA, Jorge (luego Capitán) 

Agente 2da. RONDÁN, José Luis (Policía)

y el reconocido por Hermes Fulle: Capitán Eduardo FERRO, con orden de captura nacional e internacional. Requerido en calidad de indagado.

Muchos no nos resignamos a que sigan desaparecidos casi dos centenares de uruguayos. Los retratos con sus rostros han encabezado a lo largo de los años las manifestaciones reclamando Verdad y Justicia.

Son seres humanos, mujeres y hombres con familias, amigos, compañeros, historias e ideales. Es lo que aspiramos a reflejar en cada una de estas notas.

 

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