Acto en el 48 aniversario del golpe de Estado
La Asociación « Donde Están » Francia, conmemoró el 48 aniversario del Golpe cíivico-militar dado en Uruguay el 27 de junio de 1973.
Ante una concurrida audiencia, el representante de la Asociación, dijo un texto (que reproducimos) .
Recordando los hechos crueles de la dictadura, con su larga lista de crimenes, asesinatos, torturas, y también en el recuerdo de la resistencia hacia esa dictadura , en la huelga del sindicato de trabajadores CNT con el apoyo del pueblo, de estudiantes, intelectuales y defensores de la libertad y democracia.
El acto estuvo apoyado por delegaciones de otros luchadores contra la Impunidad, contra todos los responsables del Plan Cóndor, y siempre solidarios en actos como este, lejano en la distancia de nuestros paises,Bolivia, Chile, Argentina, Uruguay, pero siempre diciendo PRESENTES para expresar como en nuestras tierras : Terrorismo de Estado, NUNCA MAS.
Texto leído por José Muñoz, representante de la Asociación ¿”Donde Están? – Francia
El golpe de estado de 1973 en Uruguay, del cual se cumplen hoy 48 años, fue un golpe cívico-militar.
El 27 de junio de 1973, Juan María Bordaberry, quien había sido elegido presidente en 1971 en condiciones dudosas, acusado de fraude en las elecciones, decide disolver el Parlamento y crear un Consejo de Estado, con el apoyo de logias fascistas de los militares.
Ya en febrero de 1973, el Ejercito y la Fuerza aérea en los llamados “comunicados 4 y 7” habian proclamado querer seguir asumiendo su participación en el marco de la “seguridad nacional” y en la “reorganización moral y material” del país. A partir del final de años 1960, los escuadrones de la muerte y los brutales métodos represivos de la policía y del ejército contra militantes políticos y sociales habían impuesto progresivamente un terrorismo de estado.
En respuesta al golpe, los trabajadores y estudiantes organizaron una resistencia que duró 15 días. Se generó una gran represión con detenciones múltiples de militantes y ciudadanos que resistían.
Casi tres años después, desacuerdos con Bordaberry llevaron a los militares a proponer el cargo de presidente a Alberto Demichelli, miembro del partido Colorado, quien asumirá el 12 de junio de 1976, por poco tiempo, ya que el 1 de setiembre del mismo año será sustituido por Aparicio Mendez, miembro del Partido Nacional, cuyo mandato duró 5 años.
El 30 de noviembre de 1980, la ciudadanía rechazó al régimen cívico-militar que perdió el
plebiscito, que había organizado para mantenerse en el poder . A pesar del beneplácito de la mayoria de los medios de comunicación (prensa, radio y tv) que con sus mentiras y agravios los acompañaron durante la campaña por el SI a la dictadura, y del apoyo de una parte de los partidos tradicionales, los militares no lograron sus fines.
En el partido Colorado, parte del pachequismo acompaño el SI, incluyendo a su lider Pacheco Areco desde su cargo de embajador en Washington. En el partido Nacional, algunos sectores del herrerismo también acompañaron la propuesta de los militares.
El 1 de setiembre de 1981 asumió la presidencia el general Gregorio Alvarez quien quedará hasta febrero de 1985, fin de la dictadura civil y militar. En 2009 ,Álvarez fue condenado a 25 años de prisión por crímenes de lesa humanidad.
Fueron 12 años de dictadura civil y militar, que si bien se cristalizo el 27 de junio de 1973 ya venia desarrollandose solapadamente desde mucho antes. Alcanza con recordar lo sucedido aquel 17 de abril de 1972, donde en un operativo de las fuerza conjuntas, los militares fusilaron a 8 obreros comunistas que se encontraban en un local del partido, en avenida Agraciada muy cerca del paso Molino. Luis Mendiola, Raul Gancio, Elman Fernandez, Justo Sena, Ricardo Gonzalez, Jose Abreu, Ruben Lopez y Hector Cervelli seran asesinados. Este crimen aun continua impune.
Con la aprobación y el apoyo de los EEUU, los militares fueron progresivamente ocupando cada vez más espacio en el manejo del país.
La mayoría de los oficiales que fueron más tarde responsables de crimenes, se habian formado en escuelas militares de EEUU, desde las más prestigiosas, ubicadas dentro del territorio estadounidense hasta la Escuela de las Américas en Panamá donde iban por tres meses. Todos se formaron bajo los preceptos de la Doctrina de Seguridad Nacional impulsada por el gobierno norteamericano para enfrentar lo que ellos llamaban “amenaza comunista internacional” que, a diferencia de los ejércitos convencionales, era un enemigo que operaba dentro del territorio nacional afectando la seguridad interna. Nunca se les dio por pensar que estaban violando principios que tocaban a su autonomía y por ende a la soberanía nacional de la cual tantas veces habian hecho alusión.
La dictadura civil y militar en el Uruguay, se apoyó principalmente en la gran burguesía oligopólica y transnacional para organizar y garantizar la aplicación de sus planes economicos que llamaban “normalizadores” y liberalizadores de la economía.
Para ello se buscó excluir a los sectores populares que habían logrado gravitar en la escena política y social por lo que fue necesario buscar la eliminación de aquellas organizaciones de clase y movimientos políticos que desafiaran la puesta en marcha de sus planes. Era indispensable suprimir las reivindicaciones de los sectores populares contrarias a la configuración que buscaba consolidar la economía imperante.
La represión, la vigilancia y el miedo que se impuso a la población fueron las herramientas del terrorismo de estado
Un ejemplo fue lo sucedido el 20 de abril de 1974 cuando un operativo militar, en la madrugada, al mando de Juan Rebollo y Nino Gavazzo, asesinó a tres jóvenes, indefensas, Laura Raggio, Diana Maidanic y Silvia Reyes de 19, 21 y 19 años. Una verdadera masacre que sigue impune 47 años después.
En noviembre del mismo año, seran secuestrados en Bs As, Graciela Estefanell Guidali, Hector Brum Cornelius, Maria de los Angeles Corbo Aguirregaray (embarazada de 6meses1/2), Floreal Garcia Larrosa (medalla de oro en los juegos panamericanos) Mirta Yolanda Hernandez, Julio Abreu y Amaral Garcia de 3 años, hijo de Floreal y Mirta Yolanda. Trasladados clandestinamente a Uruguay (en el conocido como el vuelo 0) fueron alojados en un centro clandestino de detención la Casona de Punta Gorda. El 20 de diciembre serán fusilados en las inmediaciones de Soca.
Julio Abreu será el único sobreviviente. Bajo amenazas por parte de los asesinos esperará 30 años para contar lo sucedido.Amaral de 3 años robado por una pareja de policías será recuperado en 1985
Toda protesta o intento de rebelión dentro del país fue salvajemente reprimido. Las desapariciones forzadas continuaron durante todo el periodo dictatorial : en 1981,fueron detenidos y desaparecidos Omar Paitta, Felix Ortiz y Urano Miranda. En 1982 fue detenido y desaparecido Miguel Angel Mato.
La represión al pueblo uruguayo no se limitó solo al territorio nacional. Las hordas fascistas se desplazaron también al exterior del país. Argentina, Chile, Brasil, Paraguay, Bolivia fueron tambien escenario de crímenes, secuestros, torturas, robos de niños y desapariciones forzadas.
En mayo de 1976 serán asesinados Zelmar Michelini, Hector Gutierrez Ruiz, Whitelaw Blanco y Rosario del Carmen Barredo.
En el correr del mismo año, compañeros del PVP serán detenidos en Argentina donde una gran mayoría de ellos serán desaparecidos. Gerardo Gatti, Leon Duarte.. y otros.
A fines del 75 y el 76, la llamada operación Morgan buscó desmantelar al Partido Comunista Uruguayo. Muchos compañeros serán detenidos, asesinados y desaparecidos.
Lo que conocemos hoy como « plan Cóndor » fue la herramienta que utilizaron para sus fines macabros. Crearon varios centros clandestinos de detención donde la práctica de la tortura era permanente:
– Casa de Punta Gorda o Infierno chico ; 300 Carlos o Infierno grande (servicio de material y armamento) Base Lima Zulu (calle Lezica 6529) La Tablada o base Roberto (camino Melilla y camino de la Redención -antiguamente camino de las tropas)
Torturaban, asesinaban y hacían desaparecer. Esta era la práctica cotidiana de quienes se creían ser los liberadores. Y que fueron el deshonor de la patria.
Se desplazaban con total impunidad de un país a otro en la búsqueda de compatriotas que habian dejado el país. En esas ocasiones no les preocupaba la soberanía. Los comandos militares, vinieran de donde vinieran, podían viajar de un lado para el otro, secretamente, sin formalismos, para cometer sus crímenes. Llevaban consigo el odio, la arrogancia, la maldad y desprecio del otro.
En el ejercicio de los años dictatoriales pudimos ver cual fue la seguridad que aporto al pais la
dictadura civil y militar y también cuáles eran sus conceptos de moral y de honor que querian impulsar en el seno de nuestra sociedad.
La seguridad resultó ser :
-1) la persecución política de los opositores,
– 2) la detención arbitraria,
– 3) los asesinatos,
– 4) la práctica sistemática de la tortura,
– 5) la clasificación de los ciudadanos en categorias A,B y C..( Estar en la categoria B y C impedía a todo ciudadano la posibilidad de ejercer en la función publica..ademas de ser vigilados de manera permanente por los servicios de seguridad. Los ciudadanos debían presentar una constancia de “fé democrática » para acceder a tener un trabajo, algo que muchas empresas exigían)
-6) la implantación de Tribunales Militares, donde los jueces militares actúaban bajo las ordenes de sus oficiales superiores sin ninguna garantía para el detenido.
En cuanto a la moral y al honor al que hacían alusión, pudimos ver :
– 1) el robo de niños,
– 2) la violación sexual de las detenidas,
– 3) la tortura y las condiciones inhumanas en los centros de detención.
– 4) el desinterés y cinismo con el que trataban a las familias de los detenidos cuando estas iban a buscar información sobre la situación de los mismos,
– 5) el comportamiento que tenían durante los allanamientos que hacían en los domicilios de las víctimas, donde no respetaban a quienes allí vivían. El mal trato, la prepotencia, los insultos hacia las familias de los detenidos era habitual en su manera de intervenir. Sin olvidar los robos de objetos, de dinero, etc que se llevaban una vez finalizada su intervención.
– 6) la desaparición de los detenidos políticos,
– 7) el desprecio, el rechazo y el odio hacia aquellos que no compartían su manera de pensar.
197 desapariciones forzadas y alrededor de 10 000 presos políticos en un país de 3 millones de habitantes.
Para concluir:
Hoy a 48 años, de el golpe de estado, siguen existiendo interrogantes y reclamos de parte de la sociedad sobre estos acontecimientos tan duros e inacceptables que vivió el pueblo uruguayo.
El 20 de diciembre de 2006, la asamblea general de Naciones Unidas aprobó que la desaparicion forzada era un crimen de lesa humanidad y por lo tanto no prescriptible. Uruguay figura entre los países signatarios de esa convención . No obstante, no existe consenzo en la justicia uruguaya
para juzgar los crímenes de lesa humanidad cometidos durante la dictadura. Todo es muy lento. Muchos de los responsables de estos crímenes viven con total impunidad en el Uruguay.
No hemos escuchado hasta la fecha, a ningún militar en ejercicio, aprobar y estar de acuerdo con esta decisión de las Naciones Unidas
Al contrario ha surgido un discurso preocupante de algunos civiles y ex-militares, como por ejemplo el del senador Guido Manini Ríos que se permite hacer críticas a la justicia por los procesamientos que se han hecho recientemente a militares responsables de crímenes y violaciones de derechos humanos.
Quizás el senador preferiría la existencia de los tribunales militares que operaban en los años dictatoriales donde sus jueces no impartían justicia sino que hacían lo que los altos mandos les decian de hacer. Quienes estuvimos enfrentados alguna vez con estos tribunales sabemos bien como actuaban y como resolvian los procesamientos que debían dictar.
En esos tiempos no existía la prisión domiciliaria ni las atenciones especiales ante el mal estado de salud del preso político. Algo de lo cual, los militares que han sido procesados por sus crimenes, han podido beneficiarse hoy, con la justicia del Uruguay.
La asociación ¿Dónde están? es y será siempre, un bastión más, en el mundo, en la lucha contra la impunidad, y por la memoria, la verdad y la justicia en el Uruguay. No podemos ni debemos aceptar que nostálgicos de la barbarie y de los asesinatos cometidos, antes y durante la dictadura civil y militar puedan expresar y reivindicar actos y crímenes de lesa humanidad. ! No pasaran !
Habrá memoria, habrá verdad y habrá justicia.
Nunca más terrorismo de estado en Uruguay
En el 48º aniversario del golpe de Estado en Uruguay,
los desobedientes nos hacemos presente.
En el 48 aniversario del golpe de Estado en Uruguay, el primer desobediente uruguayo, y por ahora el único, se expresó a través de una carta leída por una de nuestras compañeras en un acto conmemorativo convocado en París por la asociación “¿Dónde están?”. Agradeciendo a los organizadores el espacio que nos brindaron y su cálido recibimiento, difundimos aquí el video, con la esperanza de que otros desobedientes uruguayos alcen la voz: ¡los estamos esperando!
Imágenes del acto realizado en la Plaza Uruguay, en Paris – Francia
La presencia de los compañeros chilenos también presentes
Las representantes de argentinos y de bolivianos en Francia, trayendo su solidaridad en la fecha aniversario del golpe de Estado en Uruguay