ESTE MIÉRCOLES
Quedó detenido en España el coronel
retirado Ferro, requerido por delitos de lesa humanidad
Sobre el uruguayo pesaba una notificación roja de la Dirección General de la Lucha contra el Crimen Organizado e Interpol.
Miércoles, 27 Enero 2021
El coronel retirado Eduardo Augusto Ferro se entregó este miércoles a las autoridades en el municipio de Peñíscola, en Valencia (España), de acuerdo a lo que dijeron a El País fuentes cercanas a la investigación. Era buscado por delitos de lesa humanidad y estuvo involucrado en el Plan Cóndor. Sobre el uruguayo pesaba una notificación roja de la Dirección General de la Lucha contra el Crimen Organizado e Interpol.
Ferro era solicitado por la Justicia por el secuestro y desaparición del militante comunista Óscar Tassino en 1977. El juicio comenzó en 1985, pero fue comprendido dentro de la Ley de Caducidad. Por lo tanto, se dejó de investigar hasta 2011, cuando se reabrió el caso.
En marzo de 2017 se supo que Ferro, quien tenía prohibido salir del país por disposición de la Justicia, ya no estaba en Uruguay. Tenía que comparecer en dos audiencias, pero nunca se presentó. En ese momento fuentes militares admitieron a El País que desde hacía alrededor de dos meses el coronel retirado estaba en el extranjero.
Tras la fuga de Ferro, el Instituto de Estudios Legales y Sociales del Uruguay (Ielsur) emitió un comunicado en el que sostuvo que el militar retirado también era investigado por el secuestro y la tortura de Lilián Celiberti y Universindo Rodríguez.
En España el coronel retirado pasó un tiempo en prisión, acusado de los delitos de desaparición forzosa, homicidio, genocidio, torturas y privación grave de libertad durante la dictadura uruguaya. En junio de 2018, la Justicia uruguaya solicitó la extradición de Ferro.
Ese mismo mes, según consignó La Diaria, la Justicia uruguaya informó que Interpol España pidió que se aplazara la extradición del coronel retirado porque “no fue ubicado, encontrándose actualmente en busca y con captura a nivel nacional”.
En octubre de 2020 concedió una entrevista al periodista Alfonso Lessa. En esa instancia dijo estar viviendo en España. La entrevista salió al aire por radio Monte Carlo y allí Ferro dijo: “Estoy en un lugar apartado, esperando una resolución que no se va a dar. Acá en España estoy molestando, evidentemente. Estoy en un lugar reservado, en un pueblo chico, pero bien, cómodo”.
HABÍA HUIDO EN 2017
Detienen en España al represor
Eduardo Ferro, requerido por delitos de lesa humanidad
27.01.2021
MADRID (Uypress) – El violador de derechos humanos Eduardo Ferro había fugado del país en 2017, cuando debía comparecer ante la Justicia por el secuestro y desaparición del militante comunista Óscar Tassino.
Eduardo Ferro (Archivo/Radio Uruguay)
El exmilitar Eduardo Ferro fue detenido este miércoles en Valencia, España, según lo informado por el diario El País.
Ferro, coronel retirado, vinculado al plan Cóndor, por el que las dictaduras del Cono Sur coordinaban el accionar represivo, estaba requerido por la comisión de delitos de lesa humanidad. La Justicia lo buscaba por su participación en el secuestro y posterior desaparición del militante comunista y funcionario de UTE Óscar Tassino.
En marzo de 2017 se supo que dos meses antes había huido del país, cuando por disposición de la Justicia tenía prohibido salir.
De acuerdo a IELSUR (Instituto de Estudios Legales y Sociales del Uruguay) el militar retirado también era investigado por el secuestro y la tortura de Lilián Celiberti y Universindo Rodríguez.
En España estuvo un tiempo en prisión, acusado de los delitos de desaparición forzosa, homicidio, genocidio, torturas y privación grave de libertad durante la dictadura en nuestro país, y en junio de 2018, cuando la Justicia uruguaya solicitó su extradición, “no fue ubicado, encontrándose actualmente en busca y con captura a nivel nacional”, según informó Interpol España.
DD.HH
28 de enero de 2021
Detienen en España al coronel (r) Eduardo Ferro requerido
en Uruguay por delitos en dictadura
La Policía de Valencia, España, detuvo al coronel (r) Eduardo Ferro quien es requerido en Uruguay por la causa judicial sobre el secuestro y desaparición del militante del Partido Comunista Oscar Tassino en el año 1977.
Este miércoles 27 de enero se conoció que Ferro fue detenido en España a raíz de un pedido de captura internacional que realizó en 2017 la jueza penal, Dolores Sánchez.
La extradición de Ferro ya había sido iniciada y concedida en 2018, pero nunca se concretó porque en el momento de realizarse el militar retirado se fugó de las autoridades españolas.
Sin embargo, de ahora en más las autoridades policiales de ambos países deberán ponerse en contacto para la que España proceda a la entrega del detenido a Uruguay.
Ferro es acusado de ser el responsable del secuestro y desaparición del militante comunista Oscar Tassino en el año 1977.
El ex coronel uruguayo es acusado de ser uno de los principales protagonistas de la Operación Cóndor, una ofensiva represiva dirigida por varias dictaduras latinoamericanas de finales de los años 70 para acabar con la disidencia política.
Antecedentes
Ferro fue jefe del Batallón de Contrainteligencia Militar, además de integrar el Servicio de Información y Defensa (SID) y el Organismo Coordinador de Operaciones Antisubversivas (OCOA).
Según la organización Proyecto Desaparecidos, fue autor material de la muerte del escribano Fernando Miranda, y participó del Plan Cóndor. En Argentina fue responsable por la tortura de Andrés Bellizi y Jorge Goncalves, entre otros.
Asimismo, se ha informado que “se deshizo” del cuerpo de María Claudia García Irureta-Goyena de Gelman, secuestrada mientras estaba en estado de embarazo en Argentina y posteriormente asesinada.
También participó en el traslado ilegal a Montevideo de Universindo Rodríguez, Lilián Celiberti y sus dos pequeños hijos, luego de ser secuestrados en Brasil en 1978.
Ferro también habría sido responsable del espionaje militar a partidos políticos, sindicales y organizaciones sociales entre 1988 y 1991, ya en democracia.
MARCA DEL EX CORONEL FERRO EN LA OPERACION DEL PLAN CONDOR EN PORTO ALEGRE
«Ser perseguido por la izquierda
es una condecoración», dijo Ferro
El coronel retirado aseguró en un audio que «el desprestigio más grande que hay hacia las Fuerzas Armadas es el actual gobierno».
29 ENERO, 2021
Luego de casi 3 años prófugo de la Justicia, el coronel retirado Eduardo Ferro se contactó con Intepol Uruguay para entregarse, lo que permitió que fuera localizado y detenido en España.
Ferro es acusado de ser el responsable del secuestro y desaparición del militante comunista Oscar Tassino en el año 1977. Además, el excoronel uruguayo es acusado de ser uno de los principales protagonistas de la Operación Cóndor, una ofensiva represiva dirigida por varias dictaduras latinoamericanas de finales de los años 70 para acabar con la disidencia política.
En las últimas horas comenzó a circular un audio que habría sido grabado por Ferro luego de la conversación con Interpol, en el que explica a un «camarada» la situación.
En el audio, Ferro asegura que ya «no tiene más nada para hacer», desde el punto de vista legal, para intentar eludir la extradición.
«Me he movido como loco y no hubo caso, aparte la abogada está entregada y no me da pelota y me calienta estar llamando por teléfono y que no lo atiendan a uno, no tengo nada que esperar acá, simplemente estar vegetando», aseguró.
Ferro criticó duramente al gobierno de Luis Lacalle Pou, por entender que no respalda a los militares. «El desprestigio más grande que hay hacia las Fuerzas Armadas es el actual gobierno».
En el audio el coronel retirado dice que «ser perseguido por la izquierda para mí es una condecoración, pero cuando los que se supone que no son de izquierda no hacen nada, ese es el desprestigio más grande hacia nosotros».
Ferro permanecerá en arresto administrativo en España mientras se avanza con las coordinaciones para concretar la extradición.
Cómo fue la detención de Ferro en
España y cómo será su entrega a Interpol Uruguay
En un audio, el coronel retirado dijo que ser “perseguido” por la izquierda “es una condecoración” y lamentó que “los que se supone que no son de izquierda no hacen nada”
Tras casi tres años prófugo de la Justicia, el coronel retirado Eduardo Ferro se contactó con Interpol Uruguay para negociar su entrega, lo que permitió que fuera localizado y detenido en España. Según supo la diaria, el miércoles el abogado Carlos Bustamante hizo llegar el número de teléfono de Ferro a la dirección de Interpol para que lo contactaran.
Ferro habló con el subcomisario a cargo, Walter Ostochi, a quien le consultó sobre cuál era la mejor manera de concretar la entrega, dado que entendía que era lo mejor para la causa, según informaron a la diaria fuentes de esa dirección policial.
A partir de esa conversación se logró determinar con relativa precisión su ubicación. La información fue trasladada a la sede de Interpol España, en Madrid, y Ferro fue detenido unas dos horas después en el municipio de Peñíscola, a unos 150 kilómetros de Valencia.
Ferro permanecerá en arresto administrativo mientras se avanza con las coordinaciones para concretar la extradición. Ahora Interpol espera que la Justicia española y la uruguaya confirmen la extradición, para que Interpol Uruguay viaje a España a buscar al militar requerido por crímenes de lesa humanidad.
Antes de regresar a Uruguay, Ferro podría tener que responder ante la Justicia española por su fuga, ya que violó la medida cautelar de arresto domiciliario que se le impuso cuando se le concedió la libertad condicional, mientras esperaba que se concretara su extradición.
Sobre este punto, el abogado valenciano Carlos Colomer dijo a la diaria que las violaciones de las medidas cautelares -ya sea retiro de pasaporte, vigilancia a domicilio, orden de no ausentarse de un lugar determinado o de presentarse periódicamente ante una autoridad- están previstas en el artículo 468.1 del Código Penal Español y se penan con una sanción económica si la persona no está privada de libertad.
“Si se le acusa de quebrantamiento de medida cautelar puede retrasarse la entrega hasta que haya juicio. Pero es un proceso sencillo, que podría durar pocos meses y que sólo llevaría pena de multa, por lo que al terminar se podría hacer la entrega”, señaló el abogado.
Colomer agregó que otra posibilidad es que haya un acuerdo entre el Poder Ejecutivo y la Justicia española para proceder a la entrega inmediata de Ferro a Uruguay y dejar en suspenso el proceso por quebrantamiento de la medida cautelar, especialmente considerando que se trata de una persona requerida por crímenes de lesa humanidad.
La fuga de Ferro
La fuga de Ferro se conoció en marzo de 2017, cuando el militar no se presentó ante la jueza penal de 10º turno, Dolores Sánchez, en la causa que investiga la desaparición del militante comunista Oscar Tassino, ocurrida en julio de 1977, por lo que se emitió una orden de captura internacional.
En setiembre de ese año Ferro fue detenido en España, pero una inédita decisión de la Justicia concedió un pedido de la fiscalía para que cesara la prisión administrativa y Ferro esperara el proceso de su extradición en libertad condicional.
Luego de varios recursos que demoraron el proceso, España confirmó en 2018 la concesión de la extradición, pero cuando quiso hacerla efectiva no pudo encontrar a Ferro, hasta la noche del 27 de enero de 2021.
El militar está siendo investigado, además de por la desaparición de Tassino, por el asesinato de Fernando Miranda, cuyos restos fueron hallados en noviembre de 2005 en el Batallón 13; la desaparición de María Claudia García, trasladada desde Buenos Aires en octubre 1976; y por el secuestro de Lilián Celiberti, Universindo Rodríguez y sus dos hijos, ocurrido en Porto Alegre en noviembre de 1978. Ferro fue señalado como uno de los torturadores del centro clandestino La Tablada y el publicista Claudio Invernizzi lo identificó como uno de los torturadores del batallón de Laguna del Sauce, Maldonado.
Los audios de Ferro
la diaria accedió a un audio que habría sido grabado por Ferro luego de la conversación con Interpol, en que explica que la situación de estar prófugo lo lleva a estar “jugando a la ruleta rusa con su salud”, además de expresar que ya “no tiene más nada que hacer”, desde el punto de vista legal, para intentar eludir la extradición.
“Me he movido como loco y no hubo caso, aparte la abogada está entregada y no me da pelota y me calienta estar llamando por teléfono y que no lo atiendan a uno, no tengo nada que esperar acá, simplemente estar vegetando”, comentó.
Además, la diaria accedió a un audio anterior en que el militar critica al gobierno de Luis Lacalle Pou, considerando que no está respaldando a los militares como debería, y pide “ver si se puede llegar al más alto nivel”. Ferro dijo que “el desprestigio más grande que hay hacia las Fuerzas Armadas es el actual gobierno”.
“Ser perseguido por la izquierda para mí es una condecoración, pero cuando los que se supone que no son de izquierda no hacen nada, ese es el desprestigio más grande hacia todos nosotros”, comentó.
La detención en España del represor Ferro
de la dictadura.
La vida es una moneda
Mauricio Pérez
29 enero, 2021
El coronel (r) Eduardo Ferro, uno de los hombres más relevantes del organigrama militar en la dictadura, se entregó a las autoridades de un municipio de la Comunidad Valenciana. La razón que dio, aunque suene muy poco edificante, es que lo hizo para volver a cobrar la jubilación. Sobre su persona pesaba una orden de captura internacional librada por la Justicia por su participación en crímenes
El Coronel (retirado) Eduardo Ferro. Alejandro Arigon
Ferro fue integrante del Órgano Coordinador de Operaciones Antisubversivas y tuvo una activa participación en el 300 Carlos, centro clandestino de detención y tortura. Tras el retorno de la democracia, entre 1988 y 1991, fue jefe del Departamento III de la Dirección General de Información de Defensa. Actualmente es sindicado como partícipe central del espionaje militar de partidos políticos, sindicatos y organizaciones sociales en democracia.
En marzo de 2017, la Justicia uruguaya libró una orden de captura internacional en su contra, luego de que no se presentara a declarar en tres oportunidades, en el marco de la indagatoria por el homicidio del militante comunista Óscar Tassino. En Uruguay también es investigado por el secuestro de Lilián Celiberti y Universindo Rodríguez en Brasil.
Según un informe de Migraciones, abandonó Uruguay el 15 de octubre de 2016 y nunca regresó (Caras y Caretas, 16‑III‑17). Fue detenido en España en agosto de 2017, y la Justicia pidió su extradición. Permaneció varios meses detenido, hasta que un fiscal español solicitó su libertad, por considerar que los delitos que se le imputaban habían prescrito. Cuando el Consejo de Ministros de España aceptó enviarlo a Uruguay, Ferro estaba en libertad y se desconocía su paradero. Fue su segunda fuga.
En este contexto, el abogado Martín Fernández, del Instituto de Estudios Legales y Sociales del Uruguay, denunciante en la causa penal por el homicidio de Tassino, dijo que esta segunda detención fue recibida con cautela por los denunciantes. «Esperamos que sea entregado a nuestro país para ser juzgado como corresponde», expresó (Informe capital, de TV Ciudad, 28-I-20). Según Fernández, el proceso de extradición en España «está resuelto», pero no es posible estimar cuánto puede demorar la extradición, ya que España podría hacerle cumplir alguna sanción o pena por haberse evadido de la situación de excarcelación provisional. Añadió que el Estado uruguayo deberá estar atento y muy activo para que se concrete la extradición: «Esta situación [la fuga] no puede volver a repetirse».
Según trascendió, Ferro se comunicó con autoridades de Interpol en Uruguay para anunciar su entrega. La decisión tuvo un motivo económico. Sobre fines de 2020 Ferro envió un correo electrónico al Servicio de Retiros y Pensiones de las Fuerzas Armadas, en el que reclamaba que se le permitiera efectuar la revista de existencia o fe de vida, un trámite indispensable para cobrar la jubilación, ya que no podía presentarse en el consulado. La solicitud fue rechazada. Por orden del ministro de Defensa, Javier García, los antecedentes fueron enviados a la Fiscalía (El Observador, 28-I-20).
Un informe de la repartición militar, elaborado a pedido del fiscal Ricardo Perciballe, determinó que el militar cobró la jubilación durante todo el período en el que estuvo prófugo de la Justicia y mientras duró el proceso de extradición en España, a través de una cuenta en el Scotiabank. Pero ese beneficio se cortó en 2018, hecho que dificultó su estadía en España. El 10 de mayo de 2018, tras ser liberado a pedido del fiscal español, Ferro se presentó en el Registro Civil de Peñíscola. Allí se estableció que residía –o al menos eso dijo– en C/Juan Carles I, 21 Pta. 4, Albuixech (Valencia).
La situación llegó a oídos del exministro de Defensa Jorge Menéndez, quien cuestionó la legalidad de efectuar la revista de existencia en ese lugar, por lo que ordenó la retención de sus haberes hasta que se subsane la situación. En marzo de 2019, Ferro dejó de cobrar la jubilación, ya que no certificó estar con vida. Con su retorno a Uruguay, podrá volver a cobrarla.